Con la intención de dejar esta información más facilmente accesible y con permiso del respetable, he abierto este nuevo hilo prveniente de
otro hilo. Como siempre con estos tutoriales, la información no pretende ser definitiva, sino un repaso (o introducción) rápido para principiantes. Pueda que hayan errores o mejores tecnicas que las mias. Ruego que comentan y añadan información según corresponda.
Efectivamente, cuanto más control tengas sobre la ubicación del trabajo sobre la mesa de la fresadora (o del centrado del trabajo en el torno) más precisos serán los resultados. A estos efectos, lo importante a mantener en mente es que el comparador no mide cantidades absolutos* sino diferencias entre extremos. La base magnética de tu pregunta es simplemente una manera cómoda de situar (y más importante, mantener estable) el comparador.
Primero, merece la pena charlar un poco de los distintos tipos de comparador. Hemos de mirar tres factores a la hora de agenciarnos de un comparador: la precisión y amplitud o gama de medición; si es digital o analógico; y si es de pistón o de palanca ("dial indicator"(di)
y "dial test indicator"(dti)
respectivamente si fueras a comprar en el extranjero). Por partes:
La precisión del comparador suele venir marcado en el reloj en si, por ejemplo "0,01mm" o "0,001mm". Obviamente, el numero representa la medida abarcada por cada rayita en la faz del reloj. Creo que un error frecuente de novato es querer coger el instrumento de medición más precisa posible. En mi opinión, intentar mantener una precisión una (o más) ordenes de magnitud mayor que lo requerido no solo es una perdida de tiempo sino que introduce fallos. Como se suele decir, el albañil trabaja con centímetros, el carpintero con milímetros y el maquinista con micros. Para la mayoría de los trabajos, sobre todo con un torno o fresadora "ligero", un comparador de 0,01mm será más que suficiente.
Parece que nos chiflan los aparatos digitales. En parte por verlos como más modernos y en parte por la pereza de leer un vernier, mucha gente ha cambiado su ábaco por una calculadora, su pie de rey con vernier por uno digital, etc. Sin embargo, yo opino que para trabajos de montaje (no de medición absoluta, que es otra tema) el comparador digital es más difícil de usar que el analógico. Nuestro cerebro procesa fácilmente las relaciones espaciales -- no tienes que pensar mucho si te pregunto si tienes el ratón a la izquierda o a la derecha del teclado -- pero salvo en caso de los superdotados, tenemos que calcular cuando de números se trata. Por ejemplo, si quieres coger el punto medio entre dos mediciones -- las "nueve" y las "doce" en un reloj analógico -- tu cerebro entiende casi automáticamente que la respuesta será entre las "diez" y las "once". Si intentas hacer lo mismo con un comparador digital con las mediciones 2,06mm y 2,31mm (aproximadamente el mismo recorrido) tienes que parar para hacer sumas y restas.
Que el comparador tenga pistón o palanca es, hasta cierto punto, cuestión de gusto. El de pistón es más tolerante a la hora de colocarlo (aunque si requieres mucha precisión, deberías obedecer las recomendaciones del fabricante respeto al ángulo de medición), pero solo sirve para medidas externas, mientras el de palanca corre el riesgo del temido "error de coseno" , pero sirve para registros internos además de externos. Tu mismo, pero si solo vas a tener uno, sugiero que sea uno analógico, de palanca y con una precisión de 0,01mm (o equivalente imperial (0,001")).
Ahora que tienes claro el tema del comparador, llega la hora de usarlo. Lo más frecuente sería para centrar un trabajo en el torno, para ajustar el ángulo de un trabajo (e.g. para replicar un cono Morse) o, en la fresadora, para cuadrar el cabezal y/o tornillo de banco o para centrar un agujero (por ejemplo en una mesa rotatoria). Una muestra:
El temible trabajo de centrar una pieza en una mordaza de cuatro garras independientes se hace fácil si tienes un comparador (y, la verdad, no sé como hacerlo sin ello).
Primero, coloca el comparador de manera que quede perpendicular al trabajo y tocando ligeramente. Si empleas uno de palanca, aunque en este caso no tenemos que preocuparnos por el error de coseno, es de buena practica procurar que el ángulo de la palanca sea lo mínimo posible.
Rota (manualmente) la mordaza, notando los extremos de medición. Por ejemplo, digamos que el valor máximo sea de 3,24mm y el mínimo de 2,68mm.
Normalmente, el comparador permitirá que rotas parte del dial para dejar el cero donde quieras. En este caso, querrás dejarlo indicado en el punto entre los dos extremos. Es decir, donde estaba el 2,96mm.
Deja el trabajo de tal manera que o bien el punto máximo o el mínimo está tocando la punta del comparador. Resulta muy cómodo tener dos llaves de mordaza en esta situación, pues simplemente se trata de aflojar una garra mientras se aprieta la opuesta hasta que la aguja del comparador quede en el cero.
Haz una rotación completa del trabajo para asegurar que la aguja no "baile".
Trabajo centrado, ahora toca sacar viruta.
Creo que con este ladrillazo tienes para empezar. Si hay que esclarecer algo (y por supuesto si me he equivocado en algo) ruego que me lo comenten.
Saludos,
Josh
*Vale, sí que mide cantidades exactas, pero en la aplicación que tenemos entre manos la lectura en si del reloj no nos importa. Las unidades medidas podrían ser pulgadas, fracciones de milímetro, etc. Lo que nos concierne es cuantificar el delta (Δ) entre los extremos medidos.
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